Si tu peque aún se hace pis en la cama por la noche, respira hondo: no estás solo. Esto se llama enuresis nocturna y es más frecuente de lo que parece, sobre todo en los varones. La causa más habitual es que el niño no controla su vejiga mientras duerme. La buena noticia es que suele solucionarse por sí solo con el tiempo y, en caso de que no sea así, tiene tratamiento.
En este artículo te hablamos de los signos de alerta, las causas, los tratamientos disponibles, y te damos unas pautas para ayudar a los niños que pasan por esta situación.
Cuándo preocuparse por el pis nocturno
Los peques suelen dejar de mojar la cama con la edad. El doctor Daniel Martín Fernández-Mayoralas, especialista en Neurología del Hospital Universitario Ruber Juan Bravo y del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid, asegura que “sin tratamiento, la enuresis tiene una tasa de curación espontánea de alrededor del 15% por año, aunque puede persistir hasta la edad adulta con tasas de prevalencia de 1-3%”.
Dependiendo de la edad del niño, es conveniente acudir al especialista para valorarlo:
- Menos de 5 años. No hay nada por lo que alarmarse, es totalmente normal.
- Entre 5 y 7 años. Depende de la preocupación de los padres y de cómo afecta al niño, puede ser conveniente consultarlo con el especialista.
- Más de 6 o 7 años. Se recomienda tratarlo porque, además de mejorar la confianza del menor, consigue buenos resultados.
Causas de la enuresis nocturna o escapes de pis
Existen tres grandes razones por las que los niños se hacen pis en la cama:
- No se despiertan cuando la vejiga está llena.
- Su vejiga aún no está 100% madura.
- Su ritmo circadiano no ha ajustado bien la producción de orina nocturna, lo que se suma a una vejiga más pequeña y con falta de excitación para avisar de las ganas de orinar. Por otro lado, si tu hijo bebe demasiada agua por el día o antes de ir a la cama puede hacer que acabe mojando la cama.
En más detalle, el doctor nos explica que “en los niños pequeños las conexiones entre el cerebro y la vejiga de la orina son inmaduras, y la vejiga de libera cuando está llena, sin más”. Con la edad estas conexiones maduran y el menor aprende a controlar cuándo hacer pis, algo que sucede antes por el día que por la noche. Así que, tranquilidad.
Niños que vuelven a mojar la cama, ¿a qué se debe?
Si tu hijo ya no se orinaba por la noche y de repente vuelve a hacerlo, hay que tener en cuenta otros aspectos que pueden influir en ello:
- Incidencia familiar. Si uno de los padres tuvo enuresis nocturna, hay un 43% de posibilidades de que el niño también la tenga. Si la tuvieron ambos, sube al 77%. En cualquier caso, no significa que se herede.
- Estreñimiento. Un intestino lleno puede hacer presión en la vejiga y provocar escapes mientras duerme.
- Situaciones de estrés en casa o en el colegio.
- Trastornos del sueño como la apnea, que provoca interrupciones de la respiración mientras el niño está durmiendo.
- Otros factores como diabetes, hipotiroidismo, enfermedad renal, infecciones o hiperactividad. En este sentido, el neurólogo recomienda a los padres comunicar al médico lo que ocurre y no alarmarse, ya que “lo más probable es que estas causas raras no sean el origen de la enuresis”.
Diagnóstico de la enuresis en la infancia
Por lo general, no es necesario realizar pruebas como análisis, radiografías o ecografías. De hecho, están indicadas en muy pocas ocasiones. “El único estudio de laboratorio recomendado es el análisis de orina, descartando infección, presencia de sangre, azúcar, acetona y densidad muy baja”, matiza el doctor.
Por lo tanto, la enuresis nocturna se diagnostica mediante exploración física y la elaboración de una adecuada historia clínica. El especialista apunta que “se valorará el patrón de crecimiento, desarrollo e hitos de maduración del niño”.
Igualmente, es importante valorar la cantidad de líquido que ingiere durante el día y antes de ir a la cama, así como sus preocupaciones en el colegio o situaciones de estrés en casa.
Qué debes hacer si tu peque se hace pis en la cama
Cuando el niño no ha conseguido controlar los escapes de orina, podemos seguir un serie de estrategias o tratamientos para ayudarle a lograrlo. Se centran en tres aspectos clave:
1. Cambio de hábitos
En casa, incorpora estos trucos para evitar que tu hijo se orine por la noche:
- Disminuye la cantidad de líquidos que consume antes de dormir, sobre todo dos horas antes de ir a la cama.
- Limita los productos lácteos cuatro horas antes de que se acueste.
- Evita bebidas y productos que contienen cafeína como los refrescos.
- Enséñale ir al baño antes de dormir y a orinar con frecuencia durante el día.
2. Terapia de alarma
Este dispositivo suena al detectar humedad, despertando al niño para que vaya al baño. Es el tratamiento más eficaz, sobre todo en los niños más mayores, pero requiere paciencia, de 3 a 4 meses de uso constante. El doctor añade que “un paciente se considera curado si ha usado la alarma durante un mes y esta no se activa porque permanece seco”.
Sin embargo, esta terapia presenta algunos inconvenientes. Por un lado, si el menor no se despierta con la alarma, son los padres los que deben llevarlo al baño; y, por otro, el sonido puede generar estrés si se producen varios despertares durante la noche.
3. Medicación cuando es necesario
La desmopresina es un fármaco que reduce la producción de orina por la noche y se utiliza en niños de más de 6 años. Se administra a diario en forma de comprimidos, durante un periodo de 2 a 6 semanas. Después, se retira poco a poco para evitar recaídas. En casos más complicados, puede combinarse con otros fármacos.
Consejos para mamás y papás
Es importante apoyar a tu hijo para que lo supere sin grandes dramas. Para lograrlo, el especialista aconseja seguir las siguientes recomendaciones:
- ¡Nada de regaños ni burlas! Compararlo con otros niños que no se hacen pis solo hará que se sienta peor.
- No lo despertéis a cada rato por si quiere ir al baño. Esto afecta a su descanso y no ayuda a solucionar el problema.
- Refuerza los logros. Si una noche no se hace pis, celebradlo con él.
- Prepárale para las noches fuera de casa. Aseguraos de que tu peque lleva ropa interior de repuesto o desechable. También es aconsejable comunicárselo al monitor del campamento o a los adultos que van a cuidarlo.
¡Lo más importante es no preocuparse antes de lo necesario! Generalmente, la enuresis nocturna no es un problema grave de salud y se soluciona con la edad. Y, en caso de no hacerlo, existen tratamientos para mejorar la calidad de vida. Con apoyo y paciencia, dejará de orinarse en la cama. ¡Ánimo, que esto también pasará!